11 de febrero de 2012

Ernestito Zedillo:

El derrame de contaminantes descubierto en el área natural protegida de Samalayuca dañó arbustos de sotol, por lo que el poblado demandará a quien resulte responsable para que reponga esa flora propia del desierto.

“Se exigirá la indemnización para la comunidad por daños a esa especie así como la fauna del lugar”, dijo Javier Meléndez, presidente seccional del pueblo incorporado al Municipio de Juárez.

Indicó que una vez deslindada la responsabilidad, a quien haya generado ese tiradero se le obligará a construir un vivero para reproducir y replantar el sotol en toda el área afectada.

Aunque dijo que primero debe limpiar la zona, la cual “no es basurero de nadie”.

El sotol es una de las 248 especies de plantas que crecen en esa zona que, en junio del 2009, el Gobierno federal declaró como área protegida.

Hace unos días se detectó una sustancia de color negro que fue derramada sobre las dunas de arena y arbustos del desierto de Samalayuca.

El material derramado, que en unas partes se aprecia solidificado y en otras chicloso, se detectó acumulado en tres lagunas que se formaron en un paraje despoblado que se ubica entre las vías del tren y la carretera Panamericana, a la altura del kilómetro 314.

Al percatarse del tiradero clandestino, la presidencia seccional de Samalayuca pidió la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), quien inició un procedimiento dirigido a Ferromex, debido a que se presume se trata de un derrame generado desde los vagones que a diario se movilizan por el sector.

Ferromex ofreció enviar un documento con su postura sobre este caso, pero hasta ahora no ha cumplido.

En tanto, el delegado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), José Legarreta Castillo, indicó ayer que la sustancia tirada en el suelo debe extraerse y llevarse a un centro de disposición final de residuos peligrosos.

Indicó que cuando sucede este tipo de accidente, que tiene que ver con residuos peligrosos, la Profepa es la instancia que asiste al sitio e inicia procedimiento contra aquella empresa o persona que haya causado un daño ecológico y concluye que el responsable debe restaurar la zona, dejarla limpio, como estaba.

Rocío Gallegos
El Diario | 10-02-2012